Jorge Etcheverry
En la sempiterna mesa del restaurante o café el viejo que repasa sus anécdotas. Las interlocutoras ya se las saben todas de memoria pero se ríen en los momentos clave—mencionan de paso que ya lo han oído todo una y otra vez. Rebusca en el cajón de sastre o cartera de mujer de la memoria el suceso inédito y se da cuenta de que tienen que pasarle otras cosas para poderlas contar. Como un nido repleto de huevos en cuya entraña tiemblan los nuevos eventos en coro llamando a la acción “ mira hombre, todavía te queda un poco de cuerda en la cañuela, te puedes desplazar sin bastón por esas calles de dios o del diablo, métete en bollos, en líos diversos para después poder contárselo a la gente. Incluso en novelas escritas no hace mucho se describía a los viejos como fulanas y fulanos apenas encaramados en los cincuenta que tú dejaste atrás hace rato. Aprovecha tus genes. Lánzate de nuevo a la vida, a la historia—todavía llena de impredecibles que buscan acomodo. Mira las noticias por la tele. Date una vuelta por el Centro de la Ciudad y vuelve a insertarte—en la medida de tus posibilidades—en el ajo, el teje y maneje. Como un pájaro con alas un poco gastadas y deslucidas trata de levantar el vuelo otra vez, hombre, para que puedas volver por un rato y si todo sale bien a contárselo a las interlocutoras del lado opuesto de la mesa”.
Saturday, March 10, 2012
Wednesday, March 7, 2012
Clorodiaxepóxido
Jorge Etcheverry
Leo las noticias
Me duelen las articulaciones
No hay nada nuevo bajo el sol
En las mañanas me desplazo en la ceguera
proveniente del insomnio
eso dijo y más
medio con rabia
brotada de la médula de los huesos
que se vuelven tiza o ceniza
o a lo mejor solo se siente
despertando como efecto secundario
esas terminaciones nerviosas
que gimen a su vez en el cerebro
desde todas las partes
y me escapo de mí volando por la computadora
al otro lado acechan miríadas
masivas a la vez que solitarias
Son las cápsulas de 5 o 10 miligramos
vulgo Librium
las que me dan este respiro
o me hacen dormir
incluso a veces frente a la tele
Leo las noticias
Me duelen las articulaciones
No hay nada nuevo bajo el sol
En las mañanas me desplazo en la ceguera
proveniente del insomnio
eso dijo y más
medio con rabia
brotada de la médula de los huesos
que se vuelven tiza o ceniza
o a lo mejor solo se siente
despertando como efecto secundario
esas terminaciones nerviosas
que gimen a su vez en el cerebro
desde todas las partes
y me escapo de mí volando por la computadora
al otro lado acechan miríadas
masivas a la vez que solitarias
Son las cápsulas de 5 o 10 miligramos
vulgo Librium
las que me dan este respiro
o me hacen dormir
incluso a veces frente a la tele
Tuesday, February 21, 2012
Sobre mi cabeza...
Francisco Fernández Farragut
Sobre mi cabeza
Como vastos pájaros
Tan abarcadoras como invisibles
Sus alas
Planean en las corrientes eólicas de la historia
Los Grandes Temas
Más bien y en cristiano
Circunstancias
acontecimientos
De indiscutible Vigencia
Que desde un terreno ya sustancial
Y no retórico
Amenazan borrar a la Humanidad
Más temprano que tarde
Pero yo prefiero no acceder
A tus llamados
Oh poesía
Hasta que mi modesta voz
Pueda mostrar
pueda delinear con fuerza
Algunos esguinces vívidos
Que ayuden a destacar
Y no a embotar
Como hacen tantos
Esas terribles realidades
Que circulan sobre nuestras cabezas
Sobre mi cabeza
Como vastos pájaros
Tan abarcadoras como invisibles
Sus alas
Planean en las corrientes eólicas de la historia
Los Grandes Temas
Más bien y en cristiano
Circunstancias
acontecimientos
De indiscutible Vigencia
Que desde un terreno ya sustancial
Y no retórico
Amenazan borrar a la Humanidad
Más temprano que tarde
Pero yo prefiero no acceder
A tus llamados
Oh poesía
Hasta que mi modesta voz
Pueda mostrar
pueda delinear con fuerza
Algunos esguinces vívidos
Que ayuden a destacar
Y no a embotar
Como hacen tantos
Esas terribles realidades
Que circulan sobre nuestras cabezas
La noche
Francisco Fernández Farragut
Su melena oscura
Sin embargo amable
Nos abraza provocándonos pavor
Ya que nuestros ojos como especie
No funcionan mucho
en la oscuridad
Que por tanto poblamos de fantasmas
Pero a la vez
Nos cobija y ampara
Cálida
Para que podamos deambular
Anónimos
Con el cuello subido
Quizás fumando
Por las calles
Oscuras
Una boca de lobo
Tachonada por faroles
En esta anécdota quizás fútil
Sin puños ni banderas
diurnos
Y la luna allá arriba
Con unos tragos de más
Ella también
Y parecemos ser los únicos
Que caminamos zigzagueantes
Por tus avenidas
Noche
Su melena oscura
Sin embargo amable
Nos abraza provocándonos pavor
Ya que nuestros ojos como especie
No funcionan mucho
en la oscuridad
Que por tanto poblamos de fantasmas
Pero a la vez
Nos cobija y ampara
Cálida
Para que podamos deambular
Anónimos
Con el cuello subido
Quizás fumando
Por las calles
Oscuras
Una boca de lobo
Tachonada por faroles
En esta anécdota quizás fútil
Sin puños ni banderas
diurnos
Y la luna allá arriba
Con unos tragos de más
Ella también
Y parecemos ser los únicos
Que caminamos zigzagueantes
Por tus avenidas
Noche
Subscribe to:
Posts (Atom)